¿En qué tipo de diabetes, tipo í o tipo 2, hay más peligro de retinopatía?
La retinopatía es una complicación que puede aparecer por igual en ambos tipos de diabetes. Si en estadísticas realizadas a los veinte años de iniciada la enfermedad existe mayor frecuen cia en el tipo 1, es debido a que hay bastantes más probabilida des de que las personas con tipo 2 consigan un mejor control metabólico.
Se había dicho que las lesiones de la retina podían ser ori ginadas por la insulina.
Fue una falsa creencia difundida hace años en ciertos sectores de la población diabética. Hoy en día se tiene la certeza que esto no tiene el menor fundamento.
¿Pueden las hipoglucemias provocar o agravar la retino patía?
No existe en absoluto ninguna prueba de que así sea.
¿O pueden las oscilaciones bruscas de la glucemia, desde la hiperglucemia a la hipoglucemia, repetidas con frecuencia, ser causa de que se agrave la retinopatía?
Tampoco existe ninguna prueba al respecto.
Parece entonces que no hay ninguna duda de que la hiper glucemia es el factor causal fundamental, ¿no es cierto?
Realmente es así. Hay una prueba experimental muy significati va: unos perros no diabéticos fueron alimentados con una dieta enriquecida con galactosa que provoca una hiperglucemia conti nua sin producir propiamente diabetes. A los cinco años estos perros padecían una retinopatía con un tipo de lesiones prácti camente iguales a las de la retinopatía diabética humana.
Pero la prueba más importante la ha suministrado el llamado estudio DCCT, en el que 1.441 personas diabéticas de tipo 1 fueron estudiadas durante diez años. En uno de los grupos, uti lizando tratamientos insulínicos intensivos, se consiguió reducir de una manera continuada la hiperglucemia. La frecuencia o gra vedad de la retinopatía fue clarísimamente menor que en otros grupos, en los que no se consiguió tal reducción.
A partir de estos resultados se tiene la certeza de que una bue na corrección de la hiperglucemia es el mejor método para pre venir la retinopatía.
¿Y cómo saber que el tratamiento de la diabetes es lo bas tante bueno para conseguirlo?
El contol periódico (cada tres o cuatro meses) con hemoglo bina glucosilada puede ayudar mucho. En el grupo del DCCT
Con muy buenos resultados finales, este valor no solía superar el 7,2%.
El hecho de que en la exploración oftalmológica te encuen tren alguna lesión en la retina, ¿quiere decir que las posi bilidades de perder la visión son grandes?
De ninguna manera. Angustiarse por dicho motivo sería total mente injustificado además de perjudicial.
Hay que tener en cuenta que la inmensa mayoría de personas diabéticas a los veinte años del comienzo de la enfermedad tie nen alguna lesión (microaneurismas, etc.) y en cambio sólo una minoría acaba perdiendo la visión.
Dicho porcentaje de casos se da sobre todo entre las perso nas que se han cuidado muy poco o en los que no se ha aplicado la terapia adecuada en el momento oportuno.
Téngase en cuenta que el actual tratamiento con fotocoagu-lación es de una gran eficacia.
¿Es cierto que después de un tratamiento con fotocoagula-ción la visión puede empeorar?
La verdad es que después de tratamientos muy extensos puede notarse una pequeña pérdida de visión. También en terapias para lesiones situadas muy cerca de la mácula, la región retiniana de máxima sensibilidad. Pero hay que tener en cuenta que después los beneficios acaban siendo superiores, pues a costa de una pe queña pérdida de visión se consigue con mucha frecuencia evitar la pérdida total y definitiva.
¿Cuándo es conveniente practicarse la angiografía fluores-ceínica?
Siempre es el oftalmólogo quien debe decidirlo. En la actualidad predomina la tendencia de no realizar dicha exploración con ex cesiva frecuencia y hacerlo cuando es claramente necesaria.
¿Es cierto que la retinopatía puede agravarse en el emba razo?
Es una posibilidad. Por ello, en caso de embarazo de una mujer diabética con retinopatía, es necesaria la colaboración del oftal mólogo para realizar un serio control del fondo del ojo en el transcurso de la gestación, aplicando la fotocoagulación en cual quier momento del embarazo en caso de que fuera conveniente.
¿Hay, aparte del mal control y del embarazo, algún otro factor conocido que pueda empeorar la retinopatía?
Sí. La hipertensión arterial mal tratada. Hay que procurar, si se padece retinopatía, mantenerla bien normalizada. También el ta baco parece tener un efecto negativo, aunque es un aspecto aún no del todo estudiado.
¿Hay alguna otra medida especial aconsejable cuando ya se ha perdido gran parte de la visión?
Existen ópticos especialistas en la denominada «baja visión», que pueden disponer de recursos para obtener el máximo rendi miento práctico de la visión que aún quede. Es aconsejable con sultarles.